
MARIANA
Danza contemporánea
2023
MARIANA, de Luz Arcas / La Pharmaco, es el nombre que recibe la cabra que acompaña a los gitanos errantes, la que ofrece el espectáculo, la que baila y pone comida en la mesa. También es la mula, usada para trinar por el campesino, la asna trabajada hasta la muerte, así como el burrito que lleva a nuestro Señor. Independientemente de la edad en la que vivamos, la hembra es invariablemente el caballo de batalla. En esta performance, los sonidos y la música animan y alientan las fuerzas de la performance; mientras que el cuerpo recrea libremente la potencia del animal que se deja llevar por el ritmo de sus órganos, como en un cante flamenco a capella.
No está movida por una esencia arcaica, sino por un deseo puro de dar con la forma perfecta. Así como hablamos del cante profundo en el flamenco, también hay un cuerpo profundo en el baile. El cuerpo profundo irradia energía, vida y muerte. Ahí radica su modernidad radical y arcaica. El cuerpo profundo irrumpe en la danza, de la misma manera que se nos hace llorar, sudar o estallar en carcajadas. Las lenguas son impuras, un híbrido como todo lo que está genuinamente vivo. Una danza esculpida en piedra y arcilla, esquemática, tosca y precisa como altares, amuletos o herramientas. Esta danza se vuelve tan abstracta y simbólica como utilitaria y material.